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Aldeias Históricas de Portugal - Parte 1

Introducción:

En diferentes viajes realizados en los últimos años por el país vecino hemos tenido el placer de ir visitando cada uno de los doce pueblos de Portugal que conforman la Asociación "Aldeias Históricas de Portugal", lo que viene a ser algo parecido a la Asociación de "Los Pueblos Más Bonitos de España" en nuestro país.

Las Aldeas Históricas de Portugal son un conjunto de localidades ubicadas en el interior del país, que se caracterizan por su riqueza histórica, cultural y arquitectónica. Estas aldeas han jugado un papel importante en la historia de Portugal, desde la Edad Media hasta la Edad Moderna, y han sido testigos de diversos acontecimientos a lo largo de los siglos.

Estas Aldeas Históricas se encuentran algunas de ellas en las regiones montañosas del centro de Portugal, relativamente cerca de la frontera con España, y se han conservado en gran medida en su estado original, lo que les confiere un encanto especial y las convierte en destinos turísticos populares. Cada una de estas aldeas tiene su propia historia, pero en general comparten características similares en términos de origen, desarrollo y evolución a lo largo del tiempo.

Hemos disfrutado mucho visitándolas, ya que el recorrido hasta llegar a ellas ha sido en muchas ocasiones muy divertido y espectacular, disfrutado mucho de los paisajes y entornos que las rodean, así como también hemos podido disfrutar, como cada vez que viajamos al país vecino, tanto de la gastronomía local como de la hospitalidad de las gentes de Portugal. 

La historia de las Aldeas Históricas de Portugal como he dicho antes se remonta a la Edad Media, cuando fueron fundadas como asentamientos fortificados en zonas estratégicas para la defensa del territorio portugués. Estos pueblos se construyeron en colinas o en lugares rodeados por murallas y fortificaciones para garantizar la seguridad de sus habitantes. Las doce aldeas de las que forman parte de esta lista son: Almeida, Belmonte, Castelo Mendo, Castelo Novo, Castelo Rodrigo, Idanha-a-Velha, Linhares da Beira, Marialva, Monsanto, Piódâo, Sortelha y Trancoso.

Con el paso del tiempo, estas aldeas se fueron desarrollando y creciendo, convirtiéndose en importantes centros comerciales y de producción agrícola. Muchas de ellas se especializaron en la producción de bienes como el vino, el aceite de oliva y la lana, lo que les permitió prosperar económicamente y convertirse en importantes núcleos urbanos en la región.

Durante la Edad Moderna, algunas de estas aldeas históricas jugaron un papel relevante en la historia de Portugal. Por ejemplo, Belmonte es conocida por haber sido el lugar de nacimiento de Pedro Álvares Cabral, famoso navegante portugués que descubrió Brasil en el año 1500. Castelo Novo fue un importante centro de producción de seda y Marialva fue una localidad estratégica en la defensa de la frontera portuguesa durante las guerras de independencia contra España en el siglo XVII.

Sin embargo, con el paso del tiempo, muchas de estas aldeas históricas perdieron su importancia económica y se fueron despoblando, quedando en gran parte abandonadas. Fue en la década de los ´80 cuando se iniciaron esfuerzos de restauración y conservación de estos pueblos, con el objetivo de preservar su patrimonio histórico y cultural. Hoy en día, muchas de estas aldeas históricas de Portugal son destinos turísticos muy populares, visitadas por miles de turistas de todo el mundo que buscan sumergirse en la historia y la cultura de Portugal y disfrutar de su encanto rural y su belleza arquitectónica.

Ahora repasemos una por una estas doce Aldeias Históricas de Portugal con algunas fotos en cada una de ellas:

1 - Almeida 

Almeida se encuentra cerca de la frontera con España. Se encuentra en la región de la Beira Interior, en el distrito de Guarda, y es conocida por impresionante fortaleza y su rica historia. Ha sido un lugar estratégico en las guerras y conflictos que han ocurrido en la península ibérica a lo largo de los siglos.

La fortaleza de Almeida, construida en el siglo XVII, es uno de los mayores ejemplos de arquitectura militar en Portugal. Se compone de una fortificación en forma de estrella con varios baluartes y fosos, y ha sido escenario de numerosas batallas y asedios a lo largo de la historia. En particular, Almeida fue escenario de la Guerra de Restauración portuguesa en el siglo XVII, cuando Portugal luchó por su independencia de España.

Además de su importancia militar, Almeida también tiene un rico patrimonio cultural. La Iglesia Matriz de Almeida, construida en el siglo XVIII, es un ejemplo de arquitectura barroca portuguesa, con una impresionante fachada y detalles ornamentales en su interior. El Pelourinho de Almeida, un antiguo poste de justica, es otro destacado monumento en la aldea.

Almeida es un lugar de gran interés para los amantes de la historia y la arquitectura, con sus fortificaciones bien conservadas y su ambiente medieval. La aldea ha sido declarada Patrimonio Nacional de Portugal y atrae a visitantes de todo el mundo que buscan explorar su rica historia y disfrutar de su encanto histórico.

2 - Belmonte

Belmonte se encuentra en la región de Cova da Beira, en el distrito de Castelo Branco, en el centro de Portugal. Belmonte es especialmente conocida por su conexión con la comunidad judía. Durante siglos, Belmonte fue el hogar de una comunidad judía sefardí que se mantuvo en secreto, practicando su religión en privado debido a la persecución y la Inquisición. Esta comunidad sefardí logró mantener sus tradiciones y su cultura a lo largo del tiempo, y en la actualidad, Belmonte es considerada uno de los últimos bastiones de la cultura judía sefardí en Portugal.

Sin lugar a dudas, uno de los lugares más destacados de Belmonte es el Castillo de Belmonte, que data del siglo XIII y es un testimonio del pasado medieval de la región. También se encuentra la Iglesia de Santiago, un edificio de estilo gótico que data del siglo XIII y que es uno de los puntos de referencia de la localidad.

Otro lugar de interés en Belmonte es el Museo Judaico, que cuenta la historia y la cultura de la comunidad judía sefardí en la región. El museo incluye una sinagoga restaurada que es considerada una de las pocas sinagogas medievales existentes en Portugal.

3 - Castelo Mendo 

Castelo Mendo se sitúa cerca de la frontera con España, es conocido por su impresionante castillo en ruinas que data del siglo XIII y por su bien conservado conjunto de murallas medievales. Castelo Mendo es un lugar con una gran riqueza histórica y arquitectónica, con calles empedradas, casas de granito y otros elementos que evocan la vida en la Edad Media. La aldea ha sido restaurada y preservada para mostrar su autenticidad, convirtiéndose en un destino turístico popular para aquellos interesados en la historia y la cultura de la región. Además, Castelo Mendo cuenta con una hermosa vista panorámica del entorno rural que lo rodea. Es un lugar ideal para aquellos que buscan sumergirse en la historia de Portugal y disfrutar de la belleza de un pueblo medieval bien conservado.

4 - Castelo Novo

Castelo Novo se encuentra en la región de Beira Baixa, en distrito de Castelo Branco, y es conocida por riqueza patrimonial y su encanto medieval.

Castelo Novo cuenta con un castillo del siglo XIII que domina el paisaje y que es uno de los principales atractivos de la aldea. El castillo fue construido por los templarios y ofrece impresionantes vistas panorámicas de los alrededores.

La aldea también cuenta con un núcleo urbano bien conservado, con calles empedradas y casas de granito con detalles arquitectónicos tradicionales. Entre los edificios destacados se encuentra la Iglesia Matriz de San Juan Bautista, que data del siglo XIII y cuenta con elementos góticos y manuelinos en su estructura.

Castelo Novo es conocida por su patrimonio cultural, con varios museos que ofrecen una visión detallada de la historia y la cultura de la región. Entre ellos se encuentran el Museo del Aceite de Oliva, que muestra la importancia de este producto en la economía local, y el Museo del Cántaro, que exhibe una colección de cántaros tradicionales utilizados para el transporte de agua.

Además de su patrimonio histórico y cultural, el entorno de Castelo Novo ofrece una gran belleza natural, con parajes naturales cercanos como la Serra da Gardunha y el Río Zêzere, que ofrecen oportunidades para practicar actividades al aíre libre, como senderismo o paseos en barco.

5 - Castelo Rodrigo

Castelo Rodrigo lo encontramos cerca de la frontera con España, en la región de la Beira Alta, en el distrito de Guarda. Castelo Rodrigo es conocido por su impresionante patrimonio histórico y su arquitectura bien conservada, que refleja su rica historia y su importancia estratégica en el pasado.

La aldea de Castelo Rodrigo se encuentra en una colina, rodeada de murallas medievales que datan del siglo XIII. El castillo, que da nombre a la aldea, es una de las principales atracciones de la zona. Construido en el siglo XII, el castillo ofrece vistas panorámicas del paisaje circundante y ha sido testigo de numerosos acontecimientos históricos a lo largo de los siglos.

En Castelo Rodrigo también se encuentran varios edificios históricos, como la Iglesia Matriz del siglo XVIII, con su impresionante fachada de estilo barroco, y la Iglesia de Santa María del siglo XVI. Otro lugar destacado es la Casa de los Octógonos, un edificio renacentista construido en el siglo XVI, que se utiliza como centro de interpretación del patrimonio local.

Además de su patrimonio arquitectónico, Castelo Rodrigo también es conocida por su riqueza cultural y folklórica. La aldea ha mantenido muchas de sus tradiciones a lo largo de los años, incluyendo festivales y eventos culturales que muestran la identidad local y la historia de la región.

6 - Idanha-a-Velha

Idanha-a-Velha se encuentra en la región central de Portugal, cerca de la frontera con España y se ubica en la ladera de una colina sobre el Río Ponsul.

Idanha-a-Velha es conocida por su bien conservado patrimonio histórico, con vestigios de antiguas civilizaciones que han dejado su huella en la zona. Fue fundada por los romanos en el siglo I a.C. y se convirtió en una importante ciudad fortificada durante la Edad Media. Hoy en día, es considerada una de las aldeas históricas más importantes de Portugal.

El principal punto de interés es su catedral, que data del siglo XIII y es uno de los ejemplos mejor conservados de la arquitectura románica en Portugal. La catedral cuenta con un impresionante portal esculpido con intrincados detalles y una serie de frescos en su interior que datan del siglo XVI.

Otro lugar destacado en Idanha-a-Velha es la Torre de los Templarios, una estructura defensiva que fue construida por la Orden de los Caballeros Templarios en el siglo XIII. La torre ofrece una vista panorámica del paisaje circundante y es un testimonio del pasado medieval de la aldea, que además cuenta con otras estructuras antiguas como las murallas y las termas romanas, así como con calles empedradas y edificios de piedra que le dan un ambiente medieval único.

Idanha-a-Velha es también conocida por su entorno natural, con paisajes de montañas y ríos que ofrecen oportunidades para practicar senderismo y otras actividades al aíre libre.

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